La publicidad puede ser todo tipo de cosas. Se trata de pancartas en la calle, publicidad televisiva o publicidad impresa. Hay muchas formas de publicitar los productos. Algunos funcionan mejor y otros un poco peor. Al mismo tiempo, las empresas buscan constantemente nuevas formas de promocionar sus productos y servicios.
El interés por la publicidad en el deporte es bastante grande. Un ejemplo es la tradicional decoración de los coches de Fórmula 1 con diversos anuncios de empresas patrocinadoras. Esto también explica por qué los coches y el equipo suelen llevar las mismas letras y colores.
Está lejos de ser un sueño hecho realidad. La gente ve muchas cosas. Todo es un lugar potencial para la publicidad exterior. ¿Qué, o más bien a quién, tiende a ver más la gente? Otras personas, por supuesto.
Por eso, algunos comerciantes han tenido la idea de pagar mucho dinero a las personas que aceptan llevar los logotipos de las empresas en su cuerpo toda la vida. He aquí algunos de estos interesantes datos a modo de ejemplo.
Joe es un verdadero mastodonte de este negocio increíblemente lucrativo. En su cuerpo se pueden ver unos quince enlaces a diversos sitios. Son recursos para mayores de 18 años, así como el sitio web 2Save Martha Stewart. Muchos de estos sitios han desaparecido. Pero Joe no se quita los tatuajes. Los dejó a propósito para recordarle que bien podría haber ganado unos 220.000 dólares para su familia y para él mismo de esta manera.
Por este tatuaje dieron hasta 100.000 rublos.
Esta interesante promoción fue realizada por la tienda de 220 voltios. A cien personas que fueron las primeras en expresar su deseo de participar en esta acción, la tienda les puso un tatuaje con su logotipo. A cada voluntario para este tatuaje promocional se le pagó nada menos que 10 mil rublos.
Cabe señalar que esta acción fue digna de figurar en el Libro Guinness de los Récords.
Caro y llamativo.
Fue en 2004. Carolyn Smith, estadounidense, quería que su hijo fuera a una escuela pública. Fue este deseo el que la llevó a tomar una interesante decisión. Se hizo un tatuaje en la frente que anunciaba un casino local. Le pagaron 10.000 dólares por ello. La suma es considerable, por lo que la estadounidense consiguió cumplir su sueño y enviar a su hijo a estudiar a una institución de prestigio.
El tatuaje había sido entintado. Carolyn fue bien pagada por ello. Todo el mundo estaba contento. El casino local consiguió un portador de publicidad que popularizó el lugar. La estadounidense, por su parte, consiguió su deseo.
¿Te tatuarías la frente u otra parte del cuerpo si te ofrecieran pagar un precio elevado? ¿Piensas en si es una opción aceptable para ti? ¿Y valdría la pena si le ofrecieran una tarifa muy generosa?